domingo, 17 de febrero de 2008

UN POQUITO DE HISTORIA SOBRE EL ABORTO Y EL NEGOCIO ABORTISTA EN ESPAÑA

En un principio el aborto era un delito abobinable, que fue despenalizado en 3 supuestos para que este delito no se penase en algunos casos particulares. Ahora se ha visto que esos supuestos han permitido el aborto libre en nuestro país, uno de los más permisivos del mundo, matando a niños de 7 y 8 meses, triturándolos y saltándose toda ley y toda norma, como falsificando documentos, suplantando personalidad, trabajar sin titulación, ecografías de pega, tirando a la basura a seres humanos... todo esto, perdonen que se lo diga, pero apesta.
Yo soy médico y como tal no concibo como ninguna persona pueda quitarle la vida a otra, y mucho menos un que se cree médico.
Los médicos nos dedicamos a curar enfermedades, y el embarazo no es una enfermedad. Los médicos luchamos por salvar vidas, con el aborto no se salva la vida de ese niño. Nos escandalizaría si un bombero prendiéndole fuego a una casa. Así debería ser con los médicos. Esto es algo que va contra nuestros principios profesionales: sanar. No somos verdugos, somos médicos.

Les voy a comparar dos vidas radicalmente distintas, los dos son médicos:
Uno de ellos Jesús Poveda, psiquiatra, ha guiado siempre su vida según sus principios. El otro Carlos Morín, "ginecologo" (o mas bien verdugo) ha guiado siempre su vida en la búsqueda de su único fín: el dinero. Jesús va en moto, ha buscado siempre el bien de sus pacientes, Ha ayudado a mendigos a salir de la calle. Ha ayudado a mujeres embarazadas a seguir adelante con sus hijos incluso con su propio dinero. Trata a sus pacientes hasta el punto de ir a su casa si no vienen a su consulta. Trata a sus pacientes como si fuesen de su familia. Carlos va a trabajar en un ferrari, tiene varias "clínicas" por todo el país, y ha matado a más seres humanos de los que pueda salvar el resto de su vida. Jesús es profesor de una de las mejores universidad de medicina de España, es miembro de varias ONG, y en verano se va a dar clases a universidades de latinoamerica. Carlos busca el fín de la vida; Jesus dedica su vida al principio de la vida. Carlos ha estado en la carcel por sus crímenes pasó por ella en 1989 y de nuevo ha estado ahora esperando a ser juzgado(esta vez ni sus influencias podrán salvarle); Jesús ha llegado incluso a dormir en la carcel por defender el verdadero derecho de la mujer: la maternidad. Carlos Morín está forrado y en sus clínicas más de una mujer ha perdido la vida; Jesus ha salvado millones de vidas humanas. Llegó incluso a tener que vender su moto para pagar un juicio amañado que perdió. Un marido perdió a su mujer en una de esas clínicas y no encontró mas apoyo que el de Jesús Poveda. Carlos ha ignorado las demandas de ayuda de muchas de sus clientes; Jesus ha tratado muchas adolescentes y ha ayudado a vencer el SPA (síndrome post-aborto). Jesús Poveda mueve masas; Carlos Morín... no imagino a la masa de niños que ha podido mover. Carlos es mísero; Jesus es Magnánimo
El ser humano es libre. Libre de hacer lo que considera oportuno y acertado en cada momento, libre para dar la vida por los demás... y libre de no darla. Jesús Poveda siempre ha sido un ejemplo para todo el gremio médico, entregado hasta el extremo, para él el paciente siempre va antes que él mismo. Pero hay mucha distancia entre no ser un "Jesús Poveda" y ser un "Carlos Morín". En este caso no es dar la vida por los pacientes o no darla; ¡en este caso estamos hablando entre dar la vida por los pacientes... o quitársela! Buscar el principio o el fín. Tenemos que posicionarnos, ¿estamos por la vida, para luchar por ella? o ¿vamos a hacer oídos sordos a todo el escándalo de las clínicas abortistas? No es suficiente con no tener el bisturí en la mano, para decir que estamos en contra del aborto. Ha llegado el momento de luchar por lo que creemos, igual que Morín luchará por seguir engordando su cartera a base de niños muertos y madres desgraciadas. Nos encontramos en una balanza. Del otro lado están los millones de niños (luego hombres y mujeres) que han sido abortados. La balanza no para de inclinarse hacia ellos, porque la ley de hoy, que ni siquiera se cumple, permite que esa masa de niños siga aumentando. Nosotros estamos del otro lado. Si queremos ganar, tenemos que conseguir que los niños que iban a ser abortados y no lo son finalmente vengan a nuestro lado, el lado de los vivos.
Porque esto es así de duro... no hablamos de buenos o malos; hablamos de vivos... o muertos. ¿Tú de que lado estás? No concibo el ser humano que no luche por si mismo, por su propia supervivencia. ¿Tan ciegos estamos?
Ayudemos a las embarazadas con apoyo psicológico, amistad, consuelo, formación, material... porque en su seno llevan un regalo para el mundo. Nos intentan hacer creer que el consenso está a favor del aborto, y no es cierto, el consenso social está con la vida.
Yo le diría al Doctor Carlos Morín:
Un café, desde luego más de 80 céntimos.
Un aborto, 4.000€
Un Ferrari, 250.000 €.
¡¡La vida de cualquier ser humano, incluso la de dicho Carlos, NO TIENE PRECIO!!!!

2 comentarios:

ARCENDO dijo...

Off topic. Estimado camarada, no he tenido tiempo hasta ahora de contestar, ni agradecer tus visitas a mi blog. Por supuesto eres bienvenido.
Me encanta tu sitio, y tus ideas coinciden tanto con las mias, que con atrevimiento, y sin tu permiso, he enlazado tu bitácora, para visitarla más a menudo, espero que no te importe.
Un cordial saludo.

Enrique Pascual dijo...

Yo haré lo mismo, gracias por tus palabras de aliento, a mi también me gusta mucho tu blog. Un abrazo